Investigación e innovación han marcado una nueva edición de los Rodin User Days celebrados hace unos días en Burdeos y al que han asistido profesionales del sector de la ortopedia de varios países. Ortopedia López-Sanicor también ha estado presente en este encuentro en el que se han presentado las últimas novedades en el diseño y fabricación de prótesis, ortesis y corsés. Entre ellas, destaca el uso de la impresión 3D.
Si hay un campo en el que la tecnología 3D está propiciando grandes avances ese es el sanitario. Lo que hace unos años parecía más propio de una película de ciencia ficción, hoy es una realidad que permite la fabricación de audífonos, piezas dentales y hasta órganos humanos.
En el sector que nos ocupa, el de la ortopedia, la impresión 3D ofrece innumerables ventajas. No sólo ahorra tiempo y esfuerzo, sino que, además, ofrece mayor versatilidad y más precisión. Es el caso de la aplicación de esta técnica en la fabricación de corsés. Mediante el diseño y la impresión en 3D conseguimos modelos de gran exactitud hechos con materiales que, por ejemplo, pueden microperforarse o elaborarse en diferentes durezas o colores, ofreciendo más comodidad y adaptabilidad al paciente.
Igual ocurre en la fabricación de férulas u ortesis. A las ventajas mencionadas anteriormente se sumarían otras como la mejora estética o la disminución de molestias derivadas del uso de estas, como son posibles irritaciones de la piel por el roce o el exceso de sudoración.
Mejoras
Otros dos avances destacan dentro de las novedades presentadas en el encuentro organizado por la firma Rodin la pasada semana. Hablamos, en concreto, del Sistema Cube y el Bracesim.
Sistema Cube.
Lo presentado en Burdeos es una versión mejorada de esta técnica empleada ya para el diseño y la fabricación de asientos y lechos posturales. En este caso, el proceso se simplifica de forma notable, al igual que el tiempo: si antes para hacer un asiento era necesario tomar medidas, hacer el molde en negativo, aislarlo, espumarlo, etc, ahora basta con escanear para obtener medidas y marcas y el sistema se ocupa de fresar el positivo en espuma blanda. Eso si hablamos de la parte técnica, si de quien nos ocupamos es del paciente, el principal beneficio es una mayor precisión y ajuste y, por lo tanto, un mejor posicionamiento que repercute en la salud y calidad de vida del paciente.
Bracesim.
Este gran avance nos permite simular el efecto que tendrá un corsé antes de fabricarlo con un elevado porcentaje de fiabilidad. Es decir, permitirá evaluar la corrección que el corsé hará en el paciente, si es la adecuada o, por el contrario, es necesario modificar las zonas de presión antes de su colocación para asegurarnos de que el tratamiento con la ortesis sea lo más efectivo posible. Esta técnica, sólo es aplicable para el tratamiento de la escoliosis y supone una mejora añadida al actual proceso de diseño y fabricación de ortesis mediante el sistema Cad-Cam.