Indicadas, especialmente, para personas con problemas circulatorios y para deportistas, el uso de medias de compresión es una de las terapias más efectivas para mejorar la circulación en las piernas al facilitar que la sangre ascienda al corazón. Si esta es la primera vez que va a utilizar una prenda de compresión, estos sencillos y prácticos consejos le enseñarán cómo utilizarla y mantenerla en óptimas condiciones.
Las medias de compresión tienen un doble efecto preventivo y terapéutico. Su uso es especialmente recomendable en el tratamiento de la insuficiencia venosa crónica, un problema de salud causado por el mal funcionamiento del sistema circulatorio y que afecta principalmente a las mujeres. Actualmente no existe un tratamiento definitivo que permita recuperar totalmente el daño valvular. No obstante, el tratamiento compresivo es quizá el más importante de los existentes, ya que mejora el retorno venoso y reduce el reflujo, disminuyendo la presión venosa.
De igual modo, el uso de las medias de compresión puede ser también muy beneficioso para personas que, a causa de su trabajo, pasan mucho tiempo de pie o sentadas, para aquellas afectadas por retención de líquidos o, también, para deportistas que quieren mejorar su circulación sanguínea. En el caso de estos últimos, las medias de compresión mejoran el rendimiento muscular y reducen la posibilidad de sufrir lesiones.
Las medias de comprensión serán recetadas siempre por el médico según las características y necesidades del paciente y encargadas en una ortopedia, donde tomarán medidas exactas para un mejor resultado. Existen diferentes grados de compresión. Su elección dependerá de la patología. El tratamiento debe llevarse durante todo el día y quitarlo durante la noche.
¿Cómo ponerse una media de compresión?
Para obtener un efecto terapéutico óptimo deberá ponerse su prenda nada más levantarse por la mañana y llevarla durante todo el día. Es posible que tenga cierta dificultad para ponerse la prenda al principio, pero resultará más sencillo pasados unos días. En cualquier caso, para hacer más fácil la colocación y para prevenir daños en las prendas, se recomienda utilizar guantes de goma con una superficie antideslizante.
Cubra convenientemente cualquier herida antes de colocar la prenda.
Dele la vuelta a la media poniéndola totalmente del revés, ajuste la zona de los dedos y deslice la propia media hasta llevarla a la zona del talón. Estire la media, ayudándose con los dedos en la parte de atrás, pase la zona. Suba poco a poco las medias hasta que vayan quedando del derecho poco a poco. Por último, distribuir las medias uniformemente masajeando con ambas manos hasta que estén ajustadas sin formar arrugas.
Cuidados
Si queremos garantizar el buen uso y un mantenimiento óptimo de nuestra prenda de compresión nos será muy útil seguir estas sencillas recomendaciones.
- Evite el contacto de la prenda con ungüentos grasos, o sustancias similares.
- Las uñas largas y las joyas pueden dañar la prenda.
- Los hilos flojos o sueltos no deben cortarse, puesto que se podrían formar agujeros o carreras.
- Tenga en cuenta que el uso de prendas de compresión mal colocadas o con medidas inadecuadas puede causar problemas.
- Siempre que sea posible, las prendas deberán lavarse diariamente o al menos cada 2 días.
- Pueden lavarse a mano o a máquina a una temperatura de 30 grados, usando un detergente neutro.
- No utilice aditivos de lavado como suavizante, lejía o quitamanchas y aclare bien.
- No escurra ni seque en un radiador ni a la luz solar directa.
- Enrolle las prendas húmedas en una toalla para eliminar el exceso de humedad.
- Las prendas no se deben planchar.