Cada vez son más los deportistas que utilizan los sistemas de electroestimulación Compex para aumentar su rendimiento muscular, prevenir lesiones o acelerar la recuperación tras un esfuerzo intenso. Estas son algunas de las numerosas ventajas que ofrece esta técnica, empleada también en el ámbito sanitario para el alivio del dolor crónico o en procesos de rehabilitación.
El uso de Compex es muy sencillo y su tecnología cada vez más avanzada permite personalizar la estimulación muscular a la fisiología del usuario, ajustando el tratamiento a cada paciente. Eso lo convierte en un complemento perfecto para deportistas, personas que padecen dolores agudos o crónicos o que, simplemente, quieren estar en forma
La electroestimulación consiste en la aplicación de corriente eléctrica, a través de electrodos, sobre el tejido muscular. Consigue el mismo efecto que cuando contraemos un músculo de forma voluntaria, pero sin la correspondiente fatiga mental y cardíaca que produce el esfuerzo voluntario. Se trata de una técnica natural, que carece de efectos nocivos y que favorece el cuidado muscular. Tan sólo está contraindicado en aquellas personas que tienen marcapasos, hernia abdominal o inguinal, que padecen epilepsia o con problemas arteriales serios en miembros inferiores. Tampoco puede utilizarse en el abdomen de mujeres embarazadas.
Deporte
Tradicionalmente, el uso de la electroestimulación ha estado ligado al ámbito sanitario, sin embargo, desde hace unos años esta técnica se ha convertido en un complemento fundamental en el mundo del deporte. Compex no sólo incrementa en un 27 por ciento la fuerza muscular sino que, como recogen diferentes estudios, reporta numerosos beneficios: acelera la recuperación tras un esfuerzo intenso, reduce las temibles agujetas, ayuda a prevenir lesiones, y alivia los dolores derivados de contracturas o problemas en los tendones
En lo que respecta a su uso en procesos de rehabilitación o en el tratamiento del dolor, el uso de la electroestimulación también ofrece importantes ventajas:
-hace trabajar al músculo sin imponer grandes esfuerzos a las articulaciones.
-permite centrar el trabajo en un grupo muscular concreto.
-permite combinar diferentes técnicas y tratamientos.
-ayuda a aliviar el dolor, reduciendo o, incluso, suprimiendo el consumo de fármacos.
La electroestimulación es también muy útil en el tratamiento de personas hemipléjicas o con otras afecciones neurológicas. Asimismo, está indicada en el tratamiento de las distintas formas de incontinencia y en su prevención tras el parto, para el alivio de dolores crónicos o agudos (cervicalgias, lumbalgias o lumbociatalgias) o en determinados problemas circulatorios. Además, empleado como complemento de otros hábitos saludables, nos ayuda a contrarrestar las consecuencias de una vida sedentaria.
Por último, es importante reseñar que el uso de Compex resulta cómodo y fácil: basta aprender a colocar los electrodos siguiendo las recomendaciones del fabricante y establecer la intensidad, según el objetivo que deseemos conseguir.